Bien dicen que del plato a la boca, se cae la sopa. Y eso ahora lo debe saber muy bien la (de nuevo) senadora, Lucía Meza.
Y es que hace algunos meses pidió licencia a su cargo en el Senado de la República y, con la boca llena, “exigió” que todos los aspirantes a algún cargo en las próximas elecciones en Morelos hicieran lo mismo y conminó a que renunciaran a sus cargos para emprender el flamante camino a las precampañas no oficiales.
La legisladora, en un supuesto acto de congruencia, pidió licencia para expresar abiertamente su intención por buscar la Gubernatura de Morelos.
Sin embargo, Lucy Meza acaba de solicitar su reinstalación en su curul en San Lázaro, rompiendo todo pacto de congruencia.
Por si fuera poco, dejó claro que pese a su regreso al trabajo legislativo (que tampoco ha lucido), siguen vigentes sus aspiraciones por Morelos y, a la par de su trabajo en el Senado, continuará reuniéndose con morelenses y haciendo recorridos proselitistas.
¿Pues no que mucha congruencia?